Fachada de la Clínica Los Almendros.
Fachada de la Clínica Los Almendros.
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Clínica Los Almendros dice que le dio de alta a joven alérgico "por buen estado evolutivo"

Pese a que la familia aseguró que al paciente le dio la alergia antes de salir de la institución.

La Clínica Los Almendros, finalmente se pronunció sobre la muerte del joven Abrahan José Cafarzuza Anaya, de 20 años, quien murió en la institución el pasado sábado 12 de diciembre, tras sufrir una alergia, consecuencia de una inyección que le aplicaron, de acuerdo a lo relatado por la tía del paciente. 

La institución médica emitió un comunicado y se defendió de las acusaciones de la familia del fallecido. 

Recordemos que la tía de Abran José aseguró a este medio que un enfermero le aplicó una inyección a su sobrino para detenerle el vómito, pese a que la mamá del joven pidió que no le dieran ningún medicamento porque era paciente alérgico. 

La Clínica relató su versión de los hechos y no mencionó la situación de la inyección. 

La familia instauró una denuncia en la Fiscalía General de la Nación en contra de la institución.

Este fue el comunicado textual de la Clínica, firmado por el representante legal Carlos Ariza:

El paciente en mención consulta el día 12 de Diciembre del 2020 a las 02:04 am con un estado febril moderado de 24 horas de evolución asociado a faringoamigdalitis no purulenta, con antecedentes personales de alergia a los AINES e ingesta de medicamentos que al momento de la atención no recordaba. Fue valorado por facultativo que hace manejo según el diagnóstico tal y como aparece en la historia clínica con evolución satisfactoria y dado de alta a las 04:39 am por buen estado evolutivo del paciente se ordena salida con recomendaciones, formula médica y signos de alarma.

El paciente reingresa a las 06:50 del mismo día con otro cuadro clínico caracterizado por desvanecimiento, mal estado general extrasístoles ventriculares y es atendido por equipo médico de urgencia y unidad de cuidados intensivos. Se practica manejo de reanimación básica y avanzada en sala de reanimación tal como aparece en historia clínica con el desafortunado desenlace de la muerte del paciente, con diagnóstico de fibrilación ventricular y probable infarto agudo de miocardio.

Se informa situación a familiares y se procede al diligenciamiento del certificado de defunción y se traslada el cuerpo a la morgue.

Es de anotar, que debido al retraso por parte de los familiares del retiro del cadáver se hicieron las consultas respectivas a las autoridades correspondientes quienes avalan la conducta médica y administrativa respectiva de certificar muerte de manera natural debido a que no se presentó muerte violenta.

Importante aclarar, que una persona quien dijo ser abogado nos requirió que la clínica solicitara y llevara el cadáver a medicina legal lo cual ya había sido motivo de consulta por parte nuestra, donde nos manifestaron que podía certificarse la muerte de manera natural por médico tratante.

Otra persona ajena y el abogado solicitaron la historia clínica y se les informó sobre la normatividad vigente para este fin, que es la aplicación de la resolución 1995 de 1999 que cobija para el caso en mención.

La Clínica los Almendros lamenta profundamente la muerte de nuestro paciente y el sufrimiento de la familia porque nos unen sentimientos de amor por nuestra comunidad y además somos defensores de la vida y ejecutores de la misión médica que es el fin último de nuestro proceder.

Aprovechamos el presente espacio para solicitar la colaboración de los medios de comunicación y autoridades para que se unan a nosotros para exigir respeto y comprensión, ya que hemos cumplido a cabalidad nuestra misión y no somos culpables y responsables de la enfermedad subyacente que quizá esta persona pudiera padecer y que lo condujo a este desenlace desafortunado.

Hemos sido objeto vil e injusto de atropellos y actos vandálicos que ya están siendo manejados por la autoridad competente.

El médico es un amigo merece respeto, no somos acreedores del mal trato de nadie solo por cumplir con nuestro deber.

Atentamente,

Dr. CARLOS ARIZA GONZÁLEZ.
Representante Legal